Energía ecológica = dilema ecológico

El inicio del año ha sido de todo menos aburrido
Carteras de pedidos llenas, poca chatarra, malestar político en Kazajistán (uno de los principales países productores de cromo), y la finalización de la adquisición de una empresa mediante la cual una gran productora europea se adjudica a una de las tres recicladoras de chatarra de acero inoxidable más grandes. Este es el estado de la situación del mercado de acero inoxidable a principios de año. Sin embargo, el precio del níquel se ha visto más afectado por los desarrollos macroeconómicos. Las nuevas incertidumbres son consecuencia de la rápida y fuerte expansión de la variante ómicron. Esta parece ser menos grave, pero con una mayor tasa de infección a medida que la efectividad de las vacunas decrece. El hecho de que los políticos, el parlamento y algunas importantes autoridades de Alemania, y del resto del mundo, estuviesen de vacaciones parece bastante grotesco en vista de las amenazas de la pandemia. Debido a esto, no hay datos fiables hasta el momento o los pocos que hay están distorsionados.

No es de extrañar que los inversores, que son diferentes a los funcionarios y casi nunca descansan, han estado observando los acontecimientos atentamente y están intentando encontrarles un sentido. El Banco Central Americano, la Reserva Federal, causó un gran malestar con sus comentarios de que los mercados deberían prepararse para un cambio de rumbo aún más rápido de la política monetaria. El balance general de la Reserva Federal debería reducirse más rápido, y las subidas de los tipos de interés podrían suceder más a menudo. Esto es lo que se infiere de las actas de la última reunión de la Reserva Federal. La Reserva Federal va, por tanto, en contra de los anteriores argumentos (muy políticos, por cierto) del Banco Central Europeo (BCE) y ha vuelto a encontrar su antigua fuerza e independencia.

Lamentablemente, este no es el caso del BCE, incluso si recientemente ha habido señales de un cambio tentativo de opinión. Después de Mario Draghi, Christine Lagarde está continuando con la política monetaria flexible, al tiempo que se están ocultando de forma inteligente, preocupantes toneladas de alta inflación. El BCE ha descubierto unas cuantas nuevas áreas de actividad a las que dedicarse, como la financiación económica de los estados de la UE de menor solidez y la protección frente al cambio climático. Podría parecer que ha perdido de vista su objetivo real, que es asegurar la estabilidad monetaria del euro.

En este contexto, después de una carrera de finales e inicios de año que vio los precios a tres meses por encima de los 21.000,00/mt, el níquel ha perdido un poco de terreno, cosa que se ha atribuido a las preocupaciones causadas por la pandemia y la inflación, o al miedo que sienten especialmente los participantes del mercado especulativo a que aumenten los tipos de interés. Sin embargo, hace poco se volvió a producir un significativo repunte, hasta llegar casi a los 23.000,00/mt. No obstante, este nivel no se ha podido mantener. Estos precios están colocando al níquel en una situación de sobrecompra, así que no es posible descartar las correcciones a corto plazo.

La industria del motor informa de registros históricamente bajos
El coche, el niño bonito de Alemania y un pilar fundamental para la economía nacional, ha sufrido mucho en los últimos tiempos. Las nuevas cifras de registro se han desplomado hasta un nuevo mínimo y han alcanzado niveles nunca vistos en los últimos treinta años. Sin embargo, no solo se ha visto afectada la industria automovilística alemana, la situación también es mala en Estados Unidos. Mientras tanto, ahora Toyota ha superado a General Motors como el productor más grande en términos de unidades producidas. Por el momento, podría parecer que solo les está yendo bien a aquellos productores de vehículos que operan en mercados nacionales o de exportación donde la movilidad todavía sigue en primer plano y la sensibilidad de los clientes, ya sea por ideología o por razones financieras, todavía no es tan pronunciada respecto a la sostenibilidad y el cambio climático.

Una razón de las dificultades es el deseo político de hacer una transición tecnológica a la electromovilidad con muchos subsidios, pero el problema se ve aún más agravado por los cuellos de botella actuales en el suministro de los materiales, como chips para ordenadores y microprocesadores, puesto que los coches se han desarrollado hasta llegar a ser ordenadores con volante.

Aunque el desarrollo de nuevos modelos con motores eléctricos o motores híbridos también está avanzando de forma bastante dinámica, no es posible satisfacer la demanda existente. Por su parte, todavía hay reservas, especialmente entre los compradores de vehículos privados. Todavía hay preocupaciones respecto al valor duradero de los vehículos, puesto que la tecnología está avanzando a un ritmo vertiginoso. También hay enormes carencias en la infraestructura de carga, que no se ha desarrollado a la misma velocidad. Y, así, la filial se halla en la situación de que, por una parte, no se están produciendo y comprando suficientes vehículos con la nueva tecnología y, por otra parte, las ventas de vehículos nuevos con motores de diésel y gasolina han caído drásticamente. Por tanto, no es de extrañar que el mercado de los coches usados esté experimentando un gran auge en la actualidad.

Es también de esperar que todavía no se haya dicho la última palabra sobre tecnología de baterías ni sobre la dirección final en la que avanzará la tecnología. Algunos fabricantes como Toyota han fijado sus objetivos en la propulsión mediante hidrógeno, aunque hasta el momento están bastante solos en esto. Realmente, esto no debería afectar demasiado al sector del níquel y el acero inoxidable. Aunque el sistema de catalizador de escape de los motores de combustión utiliza acero inoxidable, que, por supuesto, no llevan los vehículos eléctricos, la cantidad de acero inoxidable utilizado en un vehículo era bastante baja debido a su elevado peso específico. En cambio, el uso de níquel en la producción de baterías ha ido aumentando de forma constante y también podría haber nuevas aplicaciones para el acero inoxidable en la tecnología de las baterías y la infraestructura de carga.

Avanzando hacia el riesgo a toda velocidad
El nuevo ministro de Economía y Acción Climática, Robert Habeck, no es tonto y, además, cae bastante bien a los medios de comunicación. Por ese motivo, ahora está insistiendo en la expansión de la electricidad ecológica. Y tiene que cumplir lo prometido: por un lado, para sus votantes y, por el otro, para cumplir con los compromisos de protección del clima. Con su agradable apertura, es uno de los primeros (por ahora) políticos responsables que deja claro que los ambiciosos objetivos climáticos realmente no pueden cumplirse. Dichas declaraciones nunca las habría hecho alguien del gabinete de Merkel. Sin embargo, Habeck prefiere gestionar el equilibrio entre la ecología y la economía y también entre la realidad y los deseos, y acepta este reto. Con un exhaustivo paquete de medidas, la expansión de la energía eólica y la solar deberían aumentarse aún más. Resulta obvio que esto no puede cumplirse del todo sin conflictos. Después de todo, el 2 % de la zona terrestre de la República Federal está destinada a utilizarse para la conversión de energía. Esto no es una cantidad pequeña.

En una entrevista con el programa de noticias de TV alemán “Heute Journal” (Noticias de hoy), el presentador le preguntó sobre esto y sobre las futuras cargas a las empresas y al público por las conversiones de energía. Si tenemos en cuenta los considerables costes y cargos (pero también oportunidades), no es tarea fácil para Harbeck hablar de estas cosas. No le falta razón cuando destaca que los elevados precios de la energía han aumentado de forma tan drástica en la actualidad debido al “hambre de combustibles fósiles a nivel mundial”, combinada con la crisis en la política exterior y la especulación. Por el contrario, las energías renovables forman parte de la solución para obtener energía asequible para los consumidores y las empresas. El suministro energético de Alemania depende en gran medida de otros países, aunque dicha dependencia podría reducirse. Por supuesto, al principio es necesario realizar inversiones sustanciales en sistemas y redes de distribución, pero los resultados positivos serían la prueba de la buena inversión. Esto es correcto, sin duda.

Cuando el presentador siguió insistiendo y preguntó cuáles serían estas cargas exactamente, quedó patente de qué están hechos nuestros políticos, los de todo el mundo. El ministro Habeck dijo que todos los ciudadanos “maldeciremos en las autovías en 2023 porque estaremos conduciendo mecanismos que se moverán a 60 km/hora debido a la expansión de tanta energía eólica”. Bueno, ojalá esa fuese la única maldición. Este agradable filósofo, psicólogo y académico alemán no podría caracterizarse mejor que con esta frase.

Su partido, BÜNDNIS 90/LOS VERDES, podrá formar parte del gobierno alemán, pero también tiene un gran dilema, puesto que la esencia de su partido está íntimamente ligada al rechazo de la energía nuclear. Algunos todavía recordarán las manifestaciones y las campañas con la pegatina redonda con un sol rojo sobre fondo amarillo bajo la consigna: “¿Energía nuclear? No, gracias”. Sin embargo, Alemania se ha quedado bastante sola en Europa y en el resto del mundo con su dogmática actitud hacia la problemática energía nuclear, sin lugar a dudas.

Los partidos “verdes” de otros países, como Finlandia, se han reconciliado con la energía nuclear porque han reconocido que no es posible conseguir una reducción importante de las emisiones nocivas para el clima a corto plazo sin energía nuclear o sin causar importantes pérdidas de prosperidad. En realidad, esto no redime a la energía nuclear, pero la convierte en un mal menor. Los Verdes de Alemania todavía no lo han reconocido debido a las razones arriba explicadas. El conflicto ideológico se ha agravado aún más debido a que la Comisión Europea ha clasificado la energía nuclear como sostenible en su Reglamento de taxonomía, que determina qué es sostenible y qué no.

Sin embargo, la entrevista se le va completamente de las manos al tratar sobre la magnitud del desafío que representa la transición energética. A Habeck no le falta razón cuando afirma que “si estableces tus miras en la excelencia, es posible fallar”. La alternativa sería no hacer nada, debido al miedo de fallar. Habeck no quiere ese tipo de gobierno. Preferiría correr todos los riesgos, y afirma que “quizá es un éxito y entonces todos podemos sentirnos orgullosos de nosotros mismos”. Si el ministro emprende esta tarea con la actitud de que solo “podría” salir bien, entonces quizá tenemos que estar realmente preocupados. Son muy pocas garantías para una tarea tan importante.

Puede que no sea buena idea que varios integrantes del personal directivo carezcan de ciertos conocimientos básicos de este campo de especialidad en particular. Y lo mismo puede decirse, por supuesto, de otros cargos del gobierno pasado y presente. Si el propio ministro no está convencido de que vaya a funcionar, al menos necesita un plan B, porque no se deberían correr riesgos incalculables. Sin embargo, parece que no hay alternativas ni una evaluación de riesgos concreta, cosa que, por encima de todo, es también un fallo del anterior gobierno. Al mismo tiempo, las ventajas a medio y largo plazo de la energía renovable son obvias.

India se compromete con el sector del reciclaje
Tal como informa la publicación comercial “Recycling International”, el sector del reciclaje de acero inoxidable de la India recibirá apoyo por parte del gobierno. Un artículo escrito por Brian Taylor llega a la conclusión de que el sector del reciclaje de acero del subcontinente indio acabó el año con un gran impulso positivo, lo que pinta bien de cara al futuro. El sector privado también se está adentrando en la economía circular. El conglomerado industrial indio y fabricante de vehículos Mahindra Group ha anunciado la firma de un memorando de entendimiento con el estado de Maharashtra para establecer una red de centros de desguace de vehículos de acuerdo con todas las normas legales y medioambientales emitidas en India. De estas declaraciones se deduce que estas normas siguen sin respetarse en grandes partes de la infraestructura actual. De acuerdo con Sumit Issar, director general de Mahindra, la empresa aspira, desde el punto de vista de la sostenibilidad, a reducir la dependencia de las importaciones de chatarra de acero inoxidable y a la conservación de los recursos naturales, además del aspecto económico.

Además, tal como Taylor escribe, el ministro del Acero, Ram Chandra Prasad Singh, ha respaldado abiertamente la producción de acero basada en la chatarra de acero y anunció que se ampliaría el apoyo. Los nuevos hornos de arco eléctrico alimentados con chatarra y los hornos de inducción desempeñan un importante papel en la estrategia de la infraestructura del acero nacional. Estos esfuerzos llegan en un momento en que algunos países asiáticos vecinos están sometiendo a examen las importaciones de chatarra, a pesar de la eficiencia de la producción de acero a partir de ella. Sin embargo, tal como muestra el ejemplo de Mahindra, lo más importante es que las actividades de este sector se desarrollen según las normas y reglamentos existentes, y que el reciclaje se deje a los profesionales y a otras partes interesadas importantes.

La VDI considera que la economía circular es un éxito de exportación
En una entrevista, la reconocida Asociación de Ingenieros de Alemania (VDI) también habló sobre la inmensa importancia de la economía circular. El sector está en un estado de transición y debemos cambiar de la economía lineal a la economía circular. Esta sería una importante ventaja para el sector del acero, puesto que los duraderos materiales del acero y el acero inoxidable ya llevan muchas décadas desempeñando un importante papel en el reciclaje de materiales y son una parte esencial de los modelos de negocio y los procesos de fabricación. Para la producción de acero inoxidable de alta calidad en Europa, la mayoría de las materias primas requeridas están hechas a partir de chatarra de acero inoxidable.

El director general de la asociación VDI-Asociación de ingeniería de materiales, el dr. Hans-Jürgen Schäfer, explica que ya se hablaba sobre el tema de la sostenibilidad en la década de 1970, pero que realmente nadie se unió al movimiento. Sin embargo, la conciencia de su necesidad ha aumentado enormemente en los últimos años, especialmente debido a las imágenes de océanos contaminados y las consecuencias del cambio climático. Además, por razones de costes, las empresas han tenido que pensar en el aumento del precio del CO2, puesto que la economía circular se está convirtiendo en un factor cada vez más competitivo. Según Schäfer, el uso de materias primas secundarias o recicladas puede reducir las necesidades energéticas de la producción de metal en hasta un 50 %. Ambos estudios, el “Scrap Bonus” (Bono de chatarra) y el “Scrap Bonus Concrete” (Bono de chatarra en términos concretos), compilados por el Fraunhofer IMW Institute y encargados por el BDSV, también llegaron a conclusiones comparables.

La VDI opina que, por lo que respecta a la clasificación económicamente sostenible de materias primas secundarias, hay mucho potencial en la tecnología de la automatización, y destaca que la economía alemana es un modelo de ejemplo a seguir a nivel global. Por tanto, la transición a la economía circular no solo asegurará los puestos de trabajo existentes sino que creará otros nuevos: “La economía circular tiene el potencial de ser un éxito de exportación”. Se trata de un mercado en expansión completamente nuevo. Además, en los mercados emergentes, la idea de la economía circular todavía está muy atrasada, tanto a nivel político como social.

Goldman Sachs y BlackRock prevén un gran aumento de los precios de los productos básicos
El banco de inversiones estadounidense Goldman Sachs sigue pensando que los productos básicos están enfrentándose a un superciclo. Esto podría durar una década, dijo Jeff Currie, director de Investigación de productos de consumo de Goldman Sachs, en una entrevista en Bloomberg Television. Por el momento, hay distorsiones de mercado en las áreas de la energía, los productos básicos y la agricultura. Además, hay inmensas cantidades de dinero en circulación. Por tanto, Goldman Sachs predice otro año récord para el sector de los productos básicos.

Ya en octubre del año pasado, Goldman Sachs se atrevió a predecir que el superciclo podría ser inminente. Podría
haber escasez, especialmente en el mercado del petróleo, incluso si los principales miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo aumentan el suministro. Currie explicó en televisión que los únicos dos países que en la actualidad están produciendo más petróleo que en enero de 2020 son Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos.

La empresa de gestión de inversiones BlackRock también espera que los precios de las materias primas se mantengan elevados durante un tiempo, puesto que la transición energética asegura una demanda continuada. Mientras que el gasto en infraestructuras lleva a una mayor demanda de acero y cemento, la descarbonización requiere más metales como el níquel. La opinión de la empresa de gestión de inversiones más grande del mundo es que todo el sector minero continúa estando infravalorado. Los inversores siguen ignorando la importancia del sector de la minería para la descarbonización. Evy Hambro, director general de Inversión temática y por sectores de BlackRock, afirmó que esto debería cambiar en algún momento, lo que llevaría a nuevas evaluaciones empresariales. Sería una sorpresa que no sucediese lo mismo para el sector del reciclaje, que es complementario y sostenible.