El níquel sufre un altibajo, pero vuelve a recuperarse. La acción está sucediendo en otros sitios. Evergrande, los datos de China, la inflación, el cierre del gobierno de EE. UU., los recortes. Más que suficiente para desestabilizar los mercados.

Incluso Indonesia quiere ser más ecológica. Se adopta la introducción de un impuesto al dióxido de carbono. Un valiente paso por parte de uno de los mayores exportadores de carbón. Pero a nivel doméstico sigue habiendo una enorme cantidad de humo.

Todavía es posible contar mentiras piadosas. ¿O ya hemos pasado esa etapa? Cómo mezclan los hechos los integrantes de los lobbies. Después de todo, es su trabajo. ¿O existen límites? Lo extraordinario solo puede alcanzarse por consenso.

Después de ED&F Man en 2007, finalmente vuelve a haber otro nuevo miembro en el círculo de la LME. A pesar de un futuro incierto, Sigma Broking Limited demuestra valentía. Probablemente se haya centrado en los inversores y todavía no haya fondos implicados en la LME.

La cautela es la madre de la sabiduría
El precio del níquel en la Bolsa de Metales de Londres perdió algo de terreno hace poco. Después de alcanzar un máximo de casi 20.500,00 USD/mt a mediados de septiembre, el precio del trimestre sufrió una rápida caída. A finales de septiembre, había alcanzado una cifra relativamente baja, de casi 17.700,00 USD/mt. Sin embargo, aquí es cuando el mercado de futuros se estancó. Empezó un movimiento de recuperación, no solo con aspectos fundamentales sino también con aspectos técnicos. Hasta la fecha, esto ha conducido a un nivel de 19.450,00 USD. Mientras tanto, los futuros del níquel en Londres vuelven a cotizar por encima de los 20.000,00 USD/mt.

Probablemente, el desencadenante de la corrección no ha tenido mucho que ver con factores fundamentales, pero sí con el aumento de una incertidumbre generalizada en los mercados con relación a las perspectivas de futuro. Esto se debe principalmente a los mediocres datos económicos de China. Esta superpotencia económica y militar tiene una gran dominancia de la demanda en muchos mercados, tal como se vio hace solo treinta años en EE. UU. (y en Europa). A este respecto, muchos participantes del mercado, especialmente los especuladores, miran hacia el Lejano Oriente para poder juzgar lo que sucederá con los precios de los distintos segmentos de inversión.

Durante un tiempo, el promotor inmobiliario chino Evergrande ocupó los titulares de la prensa y causó mucho nerviosismo, especialmente durante las fiestas nacionales chinas. Hubo miedo de que este tambaleante gigante pudiese causar distorsiones en el mercado porque cabía la posibilidad de que los pagos de intereses no se realizasen tras las fiestas. El Gobierno central chino y la empresa hicieron, y todavía están haciendo, todo lo posible para minimizar los daños, también por razones de reputación y poder. Y es bien sabido que los bolsillos del estado chino pueden ser muy profundos, pero no para todas las causas.

Por este motivo, resulta aún más sospechoso que amplios círculos estén haciendo todos los intentos posibles para quitar importancia a las consecuencias que podría acarrear el colapso de este peso pesado. No debe compararse con la bancarrota de Lehman durante la crisis financiera. Podría interpretarse que la interdependencia global de este promotor inmobiliario se supone relativamente pequeña y, por tanto, que el alcance de cualquier daño estaría limitado a China. Sin embargo, nadie puede saberlo con certeza. Además, incluso un impacto negativo significativo para la economía china podría ser suficiente para crear una desestabilización a nivel global.

Sin embargo, por lo que respecta a los mercados de productos básicos, no sería muy preocupante que algunas materias primas, como el cobre y el níquel, fluyesen hacia el sector de la construcción china, pero sí lo sería que otros inversores especuladores se retirasen del segmento de inversión de los productos básicos vendiendo sus posiciones, lo cual ya se puso de manifiesto con el colapso abrupto de los precios de los metales básicos. O incluso podrían tomar nuevas posiciones cortas para especular con una caída de precios. Podría pensarse incluso que las negociaciones en el Congreso de Estados Unidos para elevar el techo de la deuda a fin de evitar el cierre del Gobierno podrían haber influido en algo. Sin embargo, no es demasiado probable, puesto que estas batallas entre el Gobierno y los demócratas o los republicanos, según quién esté al mando, aunque atraigan la atención de los medios de comunicación, se han convertido en una tradición casi habitual que siempre acaba en acuerdo.

Ya es posible ver una influencia más grande en los datos de inflación actuales, puesto que entre los especuladores está creciendo el miedo de que la fiesta de los mercados de valores —alentados por la política del dinero barato de los bancos centrales— pueda estar acabando más rápido de lo que habían pensado inicialmente. Por tanto, la cautela es la madre de la sabiduría. Los bancos centrales se han puesto ellos mismos en una situación difícil a través de una financiación de deudas excesiva, que ha hecho casi imposible tomar las contramedidas necesarias subiendo los tipos de interés.

La siguiente noticia pone de manifiesto cómo se ha “pervertido” (lamentablemente, es necesario utilizar dicha palabra) la situación. Los datos del mercado laboral de Estados Unidos fueron significativamente peores de lo que los analistas esperaban. ¿Cuáles fueron las consecuencias? Los mercados de valores americanos se recuperaron considerablemente, puesto que entonces se esperaba que la Reserva Federal pudiese esperar un poco más antes de anunciar una restricción en el suministro de dinero. El ejemplo muestra la poca influencia que la economía real tiene todavía en el desarrollo de los precios. Esto no puede ser sano en el medio y largo plazo. Por tanto, por lo que concierne a la última recuperación de los precios del níquel, este desarrollo sigue siendo frágil y es necesario seguir supervisándolo.

Indonesia tiene una visión ecológica
La agencia de noticias Reuters, junto a otras, ha informado de que Indonesia podría convertirse pronto en el cuarto país asiático en introducir impuestos al carbono. Sin embargo, hay advertencias de que, a parte de los problemas de implementación, esto podría ocasionar gastos de energía mayores y, por tanto, reducir la competitividad de la industria y el comercio domésticos. La introducción de dicho impuesto forma parte de un ajuste más grande del sistema de impuestos que se aprobó hace poco en el parlamento indonesio. Un aumento del impuesto sobre el valor añadido y la cancelación de una reducción originalmente planificada de los impuestos sobre sociedades también forman parte de este paquete.

Se supone que el impuesto al carbono es una tasa de 30 rupias indonesias por equivalente de kg de CO2, el equivalente a unos 2,10 USD por tonelada y, por tanto, menos de la mitad de las 75 rupias que se sugirieron al principio. En comparación, el precio del carbono en el Régimen de Comercio de Derechos de Emisión de la Unión Europea es en este momento de entre 50 y 60 euros por tonelada, con una fuerte tendencia al alta. Aunque al menos Indonesia ya ha empezado a hacer algo. Para 2025, el mercado del dióxido de carbono debería haberse establecido y puesto en marcha.

Esto tampoco deja dudas sobre a dónde nos dirigimos a nivel global respecto al cambio climático y la comercialización de emisiones. Sin embargo, claramente hay un límite para todo, puesto que el fin de la producción de energía a partir de centrales eléctricas alimentadas con carbón no se ha contemplado para antes de 2056. A pesar de eso, Indonesia quiere alcanzar el objetivo de cero emisiones netas para 2060 o antes, y no para 2070.

Por tanto, es fundamental que las empresas de todo el mundo, además de evitar las emisiones directas de la producción y el consumo de energía, también tengan cuidado en los productos y servicios básicos que eligen, comprueben la sostenibilidad y las emisiones indirectas de la producción de estas materias primas. De hecho, no debería ser necesario mencionar que, en este aspecto, el reciclaje de materias primas como la chatarra de acero inoxidable y acero inoxidable tienen aún mayor importancia.

También debería destacarse que es un paso enorme y valiente por parte del gobierno de Indonesia, puesto que Indonesia pertenece, como uno de los mayores exportadores de carbón térmico y productos del níquel (como el arrabio de hierro de níquel o NPI), a los ocho mayores emisores de carbono del planeta. No es de extrañar, puesto que un 87 % de la producción eléctrica de Indonesia sigue procediendo de fuentes fósiles no renovables. El objetivo por todas partes es animar a la industria a realizar un cambio hacia una producción de energía y una fabricación de productos más limpias en general, internalizando los costes del cambio climático.

Las perturbaciones económicas deberían seguir evitándose en este proceso de cambio en el interés de un crecimiento continuo de las economías nacionales, pero esto no puede suceder sin una regulación de los mercados, puesto que normalmente el CO2 no tenía precio y, por tanto, no se había tenido en cuenta en ningún mecanismo de precios. Y los objetivos son desafiantes, puesto que se acaba el tiempo para aplicar medidas de neutralización a nivel global. En este contexto, es necesario hablar sobre los países que van muy avanzados en términos de regulaciones y prosperidad a fin de ofrecer asistencia a los países emergentes por el interés común. Sin embargo, otros países productores de carbón, como Australia e India, también están luchando con la difícil tarea de reconciliar el medio ambiente con el desarrollo económico.

El impuesto de exportación sobre los productos de níquel, bajo discusión
En este punto, también hay más noticias procedentes de Indonesia en lo relativo a las exportaciones de níquel. Como Fastmarkets resume, según el ministro de Inversiones Bahlil Lahadalia, Indonesia está examinando la posible introducción de un impuesto de exportación sobre los productos de níquel con un contenido de níquel inferior al 70 %. El objetivo es aumentar todavía más la cadena de valor añadido dentro del país y, de forma indirecta, estimular las inversiones. Ya se ha aplicado con éxito la prohibición de exportar mineral de níquel sin refinar, lo que ha dado como resultado el establecimiento de una gran industria de producción de níquel y acero inoxidable.

Recientemente, se ha empezado a hablar sobre la producción de baterías basadas en níquel, y no habría objeciones a la hora de desarrollar una base de fabricación para vehículos eléctricos, más bien al contrario. Debido a sus grandes depósitos de níquel, Indonesia posee el apalancamiento suficiente para poder realizar tales inversiones en fases posteriores. Sin embargo, no deberían pasarse de la raya con una política y un cambio de curso repentinos, puesto que no hay nada que los inversores odien más que la incertidumbre a la hora de planificar. Sin embargo, para mostrar que no estamos hablando de castillos en el aire, sirva como prueba el hecho de que las empresas surcoreanas LG Energy Solution y Hyundai Motor Group acaban de empezar a construir una fábrica de baterías en Indonesia con un volumen de inversión de 1100 millones de USD.

Mezcla de hechos deshonesta
No es casualidad que los integrantes de los lobbies farmacéuticos, automovilísticos y siderúrgicos en Europa pertenezcan a los grupos de interés industrial más influyentes. Unos presupuestos enormes y muchos individuos con buena formación ubicados en el centro de la toma de decisiones, como por ejemplo en Berlín y Bruselas, están siempre preparados para ejercer su influencia donde se desee y, a veces, incluso donde la necesiten y requieran los procesos políticos. De este modo, es posible encauzar las opiniones de las autoridades y los dirigentes políticos hacia la dirección “correcta” y, a veces, incluso influir en la redacción de leyes y normativas. Después de todo, los políticos y administradores a veces carecen de la experiencia suficiente y, especialmente, de tiempo.

Sin embargo, ahora en octubre la asociación europea del acero EUROFER y tres otras asociaciones de metales no ferrosos han publicado un artículo en el que se explica su postura de forma conveniente poco antes de la revisión del Reglamento sobre el traslado de residuos de la Unión Europea, aunque entrar en detalles sería sobrepasar el alcance de este documento. Para resumir en unas pocas frases (afortunadamente, estas frases ya están impresas en negrita en el artículo), EUROFER y Co., representando a sus empresas miembro, hacen la siguiente demanda: Para cumplir con el Green Deal y los objetivos industriales de la UE, los residuos que la UE exporta a terceros países en el futuro deben tratarse con los estándares y técnicas equivalentes al modo en que se tratarían en Europa.

En principio, esto suena bastante razonable si se habla sobre exportaciones de residuos mixtos, quizá incluso de residuos del hogar e industriales tóxicos, que deben ser clasificarse y procesarse, y desechar los otros residuos. Sin embargo, debe quedar claro para todos que los residuos a los que EUROFER se refiere también incluyen toda la chatarra de acero, acero inoxidable y de metales no ferrosos que ya se ha procesado según los estándares de la UE. Esta se exporta, por ejemplo, a plantas de acero que, utilizando la lógica del artículo de posicionamiento, se consideran como plantas de tratamiento de residuos en países de fuera de la UE.

Estas plantas de acero son en muchos casos más nuevas que la infraestructura del acero en Europa, con instalaciones mucho más modernas y, especialmente cuando se trata de chatarra de acero, con hornos de arco eléctrico que funcionan (o pueden funcionar) con energía generada de forma sostenible. Por tanto, esta exportación es muy razonable para el clima global, al contrario que la producción de acero inoxidable en la UE, que se lleva a cabo en altos hornos alimentados con carbón, incluso al tener en cuenta la cara tecnología con hidrógeno del futuro.

Por otra parte, el artículo habla de “igualdad de condiciones” y del daño medioambiental y social que debe evitarse en los países en desarrollo, así como tener en cuenta los aspectos de salud y seguridad allí. Como ejemplo, se mencionan las exportaciones de chatarra electrónica en el sector del reciclaje informal en África. Se argumenta que ciertas cantidades de chatarra en cualquier forma podrían absorberse en Europa y que, por tanto, solo se exportaría porque es posible pagar precios más altos debido a los estándares más bajos de los países importadores.

Podría pensarse que EUROFER quiere erigirse como abogado en nombre de los dueños de las plantas de reciclaje de Europa. Esto se debe a que ellos y sus asociaciones llevan mucho tiempo enfrentándose a problemas como este y similares, por ejemplo, en materia de exportación de vehículos al final de su vida útiles declarados como coches usados, lo que significa que las plantas de desguace locales carecen de material entrante. Cualquiera con cierto nivel de competencia comprenderá rápidamente que este movimiento está claramente destinado a conseguir algo más.

El objetivo real es, sobre todo, detener también la exportación de chatarra de acero y de metales no ferrosos con el fin de crear un exceso de oferta artificial de materiales de alta calidad en Europa a precios artificialmente bajos para los consumidores de productos básicos. Sin embargo, debido a las normas actuales de la Organización Mundial del Comercio, es imposible conseguir esta quimera solo a través de restricciones comerciales y aranceles. Por tanto, la ley de residuos y, en particular aquí, la regulación del traslado de residuos se está utilizando sin problemas para obligar a los exportadores de la UE a demostrar que en el futuro se utilizarán las mismas técnicas y estándares en el país de destino que en la UE.

Esto, por supuesto, crea muchos obstáculos, ya que las definiciones concretas y la prueba de los estándares y técnicas requeridas pueden bloquear el mercado de forma efectiva y hacer que las exportaciones sean casi imposibles. Una vez se ha decidido el plan más grande, los políticos pueden pasar al siguiente problema sin tan siquiera preocuparse por los detalles más importantes ni evaluar las consecuencias de dichas decisiones.

EUROFER contempla los siguientes criterios para determinar la equivalencia en los países de destino: emisiones al nivel de las Mejores técnicas disponibles (niveles de emisión asociados a las mejores técnicas disponibles), cambio climático, legislación sobre residuos y respeto a los derechos humanos, sociales y laborales fundamentales internacionales en los países importadores.

Desafortunadamente, hay muy pocos parlamentarios de la UE que estén contentos con esta idea cuando piensan en los altos estándares de la UE pero, sobre todo, el indigno trabajo de clasificación de residuos a mano en Asia y África, o quizá en la ruptura del barco en India. De forma invariable, enseguida nos vienen a la mente las imágenes de niños atrapados en el trabajo forzoso. Y por casualidad, cómo no, la maquinaria de RR. PP. de los integrantes de los lobbies nunca se cansa de recordarles a los dirigentes políticos estas imágenes a cada oportunidad que tienen, así como de nombrar ejemplos para reforzar estos pensamientos

Lógicamente, hay poco que leer en el artículo sobre las razones para la exportación de excedentes de chatarra de acero desde la UE. Además de un gran suministro debido a las grandes reservas de chatarra antropogénicas, a veces porque en realidad no se ha producido la suficiente demanda en la industria del acero en Europa, a veces sistemáticamente o por razones técnicas (altos hornos), puesto que la preferencia ha sido importar mineral u otros metales baratos de otros países cuyos estándares no siempre están en cumplimiento con los estándares medioambientales, sociales y gubernamentales comparables a los de la UE. Además, siempre surge el argumento de que la calidad de la chatarra de acero no es lo suficientemente buena para su uso en la producción de acero plano. Sin embargo, esto no es cierto, puesto que solo es cuestión de pagar el precio correcto para obtener el procesamiento adecuado. Hasta ahora, simplemente no había nadie preparado para pagar el precio.

Por tanto, lo que es absolutamente correcto y sensato para los residuos mixtos y peligrosos y debería ser regulado —que, por cierto, ahora hay una importante prohibición impuesta por países como China, Malasia, etc.— es absolutamente incorrecto y contraproductivo para el reciclaje de materias primas de gran calidad, que se tratan del mismo modo en este régimen de residuos. Por tanto, hay que pedir a la UE que no se deje manipular por las razones equivocadas. Los residuos mixtos y peligrosos necesitan regulaciones de exportación, mientras que el reciclaje de materias primas de gran calidad definitivamente no lo necesita.

También habría que dejar clara la distinción en la legislación de la UE de que entre las categorías de residuo y producto debería haber otra, es decir, la del reciclaje de materias primas de gran calidad, o recurso. Básicamente, los altos objetivos fijados por la UE solo pueden conseguirse si los legisladores, los ejecutivos y los integrantes de la industria trabajan en equipo. Parece que no ha sido así hasta la fecha, si una industria quiere marginalizar a la otra.

El primer nuevo miembro del círculo de la LME después de 14 años
Tras 14 años durante los que el número de miembros del círculo de la LME no ha parado de bajar debido a las fusiones, a los cambios a la categoría 2, que es más barata, y a los cierres, ahora podemos dar la buena noticia de que, según Reuters, Sigma Broking Limited ha solicitado unirse al ilustre círculo de miembros. Por fin hay una nueva adición a los últimos ocho bancos y corredores de bolsa restantes que desean continuar, y que han aguantado hasta la fecha, la comercialización en el parqué en la LME que, tras la Covid-19, volvió a abrir sus puertas el 6 de septiembre de 2021.

Según su propia información, Sigma Broking Ltd, es una empresa de correduría de bolsa de capital privado fundada en Londres en 2008 y cuyo inversor principal es el agente comercial de futuros Matthew Kent. Desde el punto de vista económico, la plataforma de gestión de riesgos y cumplimiento NAVEX Global también está relacionada con dicha correduría a través de su filial inglesa. Sigma desea ofrecer a sus clientes, como los fondos de inversión libre, un valor añadido con el comercio en el círculo y, en especial, atraer inversores a la LME que todavía no estén activos en ella. En general, esta correduría parece estar dirigida más hacia los inversores institucionales que hacia las empresas de la economía real. Con una facturación de 17 millones de libras esterlinas para el año financiero terminado el 31 de mayo de 2020, todavía no parece ser uno de los grandes actores globales de este negocio.

LME (Bolsa de Metales de Londres)

         
Cierre oficial de la LME (3 meses)
15 de octubre de 2021
  Niquel (Ni) Cobra (Cu) Aluminio (Al)  
Cierre oficial 19.830,00 10.177,00 3.185,50  
3 meses. Preguntar USD/mt USD/mt USD/mt
Valores de la LME en mt
  15 de septiembre de  2021 15 de octubre de 2021 Delta de             mt Delta en    %
Niquel (Ni) 174.282 146.022 – 28.260 – 16,22
Cobra (Cu) 234.000 181.400 – 52.600 – 22,48
Aluminio (Al 1.299.900 1.118.325 – 181.575 – 13,97

Oryx Commodity News

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